Viaje del miedo: cuando los destinos asustan

Por Verónica Luna
Acaso una de las historias que más fantasías despierta sea la del Conde Drácula. El famoso relato logró instalar imágenes mentales a fuerza de generar temores. Los paisajes de Transilvania quedaron asociados a la oscuridad, la soledad y la frialdad que el cine instaló a través de la historia del vampiro.
El Castillo de Bran es un museo dedicado al Conde Drácula y su leyenda. Según la versión más difundida, el despiadado príncipe que bebía la sangre de sus víctimas era el morador del castillo. Sin embargo, otros relatos sostienen que el personaje que inspiró a Stocker para escribir su famosa novela apenas si pasó un par de días allí. No obstante, la construcción es el escenario principal de la narración y en sí misma genera escalofríos.
El edificio está  situado entre Transilvania y Valaquia (Rumania). Es una fortaleza que data del siglo XIII. Fue construido sobre un peñón lo que le dio un rol fundamental para la defensa y la vigilancia del tráfico comercial. Su carácter gótico y sus pocas ventanas contribuyeron a alimentar el mito del vampiro. En su interior se puede visitar un patio y un laberinto de pasajes subterráneos. Se realizan visitas guiadas aunque también puede recorrerse en forma individual. 
El Osario de Sedlec
El clima funesto que habita en todo camposanto se potencia en la capilla de la iglesia del Cementerio de Todos los Santos (República Checa). El diseño gótico del templo refuerza el simbolismo tenebroso y oscuro que se le asigna a la muerte. Pero si esa postal no fuera lo suficientemente densa, el osario que hay en su interior logra ofrecer un panorama que inspira al miedo.
El cementerio fue uno de los más poblados debido a su fama. La historia cuenta que el abad había esparcido en su superficie algo de tierra traída de la ciudad donde nació Jesús y que eso provocó la creencia que el alma de los muertos llegaría más rápido al cielo. Por ese motivo, todos querían darle cristiana sepultura a sus muertos en ese cementerio. Más tarde, la gran cantidad de víctimas de pestes y guerras que se desataron en el siglo XV hicieron necesario ampliar el espacio para las catacumbas y los esqueletos se acumularon en el osario. Fue en el siglo XIX cuando los huesos pasaron a formar parte del mobiliario de la capilla. Unos 40 mil esqueletos pasaron a ornamentar las lámparas y recubrir paredes y techos.
El Osario puede visitarse todos los días, y en verano se puede recorrer incluso de noche.
La Isla de las Muñecas (México)
Un paisaje que podría ser el paraíso de especies animales y vegetales muestra su faceta más funesta. Muñecas que cuelgan de los árboles en su estado más lamentable le dan a una isla de Xochimilco una historia tenebrosa cuyo relato atrapa a turistas valientes.
La narración popular cuenta que un ermitaño era el único habitante de la isla. Este señor se dedicaba al cultivo de hortalizas que luego vendía en el pueblo. Un día, una joven se ahogó cerca de su plantación, y desde entonces se escuchaban lamentos y sonidos extraños. El hombre se dedicó a juntar muñecas y colgarlas por toda la isla con la creencia de que de ese modo espantaría a los fantasmas.  Dicen que el hombre murió en el mismo lugar en el que se ahogó la joven.
El marco es ideal para el tejido de todo tipo de historias. Entre las muñecas, hay una que era la preferida del dueño de la isla, la cual se cree que concede algunas gracias y a cambio, los turistas le dejan algunas monedas.  La isla se puede visitar en cualquier momento, pero dicen que el paseo por la noche es realmente tétrico.
El Hotel Stanley, Colorado (EEUU)
Construido a principios del siglo pasado, el hospedaje está ubicado en un encantador paraje del Parque Nacional de las Montañas Rocosas. Tiene 140 habitaciones y numerosas historias de fantasmas que lo vuelven atractivo para los valientes turistas que sucumben a las historias de aparecidos. 
En sus comienzos el hotel resultó un verdadero derroche de lujo puesto que contaba con agua corriente, electricidad, y teléfono. Personalidades famosas se daban cita en sus instalaciones. Uno de sus huéspedes más emblemáticos resultó ser el escritor Stephen King quien escribió algunos de sus libros inspirado en sus vivencias en este albergue. Sin embargo, el hotel parece haberse vuelto más popular a partir de los testimonios que dan cuenta de la presencia de fantasmas. El vestíbulo, la sala, el piano, y las habitaciones son epicentro de numerosos acontecimientos paranormales como niños que se ven en los pasillos o se los oye jugar en las habitaciones mientras que no hay niños alojados en el hotel.  También es posible que los objetos se muevan de lugar, ver al matrimonio Stanley deambulando por el hotel, o inclusive cruzarse con un fantasma ladrón.
Los mitos y leyendas que envuelven a los destinos turísticos forman parte de su patrimonio intangible. Los aventureros que arman sus valijas en búsqueda de lugares que erizan la piel, podrán encontrar lugares como el Lago Ness (con su monstruo que aflora de las profundidades),  Whitechapel (los dominios de  Jack el Destripador), o Hampton Court (el castillo encantado por donde dicen que vaga el fantasma de Catherine Howard, la tercera esposa de Enrique VIII). Para los amantes de los viajes las opciones no se agotan, para los amantes del miedo, tampoco.
¿Alguna vez visitaste alguno de estos lugares u otros que provocaran miedo? Compartí aquí tu experiencia.