Parque Nacional Quirimbas: cuando el paraíso queda en África

Por Aldana Chiodi
Levantarse con los primeros rayos del sol, saborear un aromático desayuno y observar por la ventana de la cabaña la belleza y la soledad de playas blancas y aguas turquesas son algunas de las actividades que se pueden realizar en la isla de Matemo, en el Parque Nacional Quirimbas. Ubicado en el norte de Mozambique, en la provincia de Cabo Delgado, este parque está formado por una zona continental y un archipiélago donde se preservan manglares, bosques costeros y arrecifes de coral.  El Parque se extiende por unos 7.500 km2 y viven en su interior alrededor de 120.000 personas.
Matemo
Matemo es la isla que posee los lodges más lujosos de la zona y donde reina ese silencio especial que solo se disfruta en los paraísos naturales. Los lodge son all inclusive y todas las habitaciones tienen unas hermosas vistas que quedarán guardadas en nuestras retinas para siempre. Es el lugar ideal para una luna de miel soñada o para esas vacaciones en pareja o en familia en las que solo nos tenemos que preocupar por descansar y disfrutar. Desde Matemo se pueden visitar de manera más accesible otras pequeñas islas como Rolas. Allí, no hay lodges ni casas, solo viven cangrejos y una sola familia, la del guardaparque de turno.
Isla de Ibo
Pero Quirimbas tiene actividades para todos los gustos. Para aquellos que deseen conocer sobre el pasado colonial de esta parte del mundo, pueden visitar la isla de Ibo, la más grande y poblada del archipiélago. Allí no se encuentran playas de arena blanca ni agua transparente, pero es un buen lugar para conocer de cerca la vida de los habitantes de la zona y las huellas que fueron dejando con el transcurso del tiempo los primeros comerciantes árabes, holandeses y portugueses. Entre las huellas del pasado se descubre que Ibo fue uno de los centros de comercio de esclavos más importantes para los árabes y que el idioma que más se habla es el kimwani, una mezcla entre el swahili y el árabe.
En Ibo existen algunos hoteles más económicos que en Matemo y, una opción para no perderse las aguas cristalinas y las playas de arena blanca es realizar una excursión durante el día a los cientos de bancos de arena que se forman entre casi todas las islas. Algunas empresas organizan este tipo de excursiones e incluyen la comida, la bebida y algún tipo de refugio para el sol.
Quisiva
Quisiva es una de las islas más extensas del sur del Parque. Si bien no tiene infraestructura hotelera, merece la pena contratar una vuelta en barco por sus costas para apreciar su principal atractivo: la presencia en sus alrededores de rocas en forma de hongo, que pueden llegar hasta los 15 metros de altura. Estas rocas se formaron por la erosión del agua y del viento. En la superficie de cada una suele encontrarse abundante vegetación.
No solo soy una playa bonita
Si bien el sector más visitado es el de las islas, con sus hermosas playas y aguas turquesas, el Parque Nacional Quirimbas también ofrece otros atractivos para los amantes de la naturaleza. En la parte continental se pueden visitar campamentos en los que se organizan algunos safaris de lujo para observar de cerca plantas y animales autóctonos. Además, gran parte de su extensión está cubierto por los inselberg (un vocablo que proviene del alemán berg e insel y que significa montaña-isla). Estas montañas de cimas redondeadas sobresalen como islas en medio de la vegetación. Se pueden hacer trekkings por algunas de ellas y apreciar el pasaje “isleño” desde la cima.
¿Cómo llegar?
En general, el punto de partida para visitar el Parque Nacional Quirimbas es la ciudad de Pemba. A Pemba se accede en avión desde Maputo (la capital de Mozambique) o desde otras capitales como Dar es Salaam (Tanzania), Johannesburgo (Sudáfrica) o Nairobi (Kenia). También es posible acceder en buses locales, pero los viajes suelen ser muy largos y las mejores líneas de buses todavía no llegan hasta Pemba
Para llegar a las islas, muchos turistas arriban en avionetas privadas desde la ciudad de Pemba. Tanto Matemo como Ibo poseen pistas de aterrizaje. También se puede contratar el viaje en barcos privados que salen desde la costa de Pemba hacia el archipiélago. Otra opción es tomar un bus hasta la localidad de Quissanga y, desde allí, otro hasta la aldea de Tandanhange. Una vez en la costa, se puede arreglar con alguno de los dueños de los barquitos para hacer el recorrido hasta las islas. Es necesario tener en cuenta que a veces habrá que esperar hasta que suba la marea para poder llegar en estos barcos a las islas.
Si has estado en Mozambique cuéntanos tus experiencias.