Turismo bajo cero: Antártida y Ártico

Magníficas extensiones de hielo, flora y fauna que solo se puede admirar allí y la sensación de estar en los confines del mundo se pueden vivir al visitar tanto la Antártida como el Ártico.

Te contamos cuales son las mejores opciones para acercarte un poco más a estos continentes helados que, hasta hace unos años, representaban un misterio para el común de los viajeros.

Antártida

Por lo general, la manera más común y accesible de llegar a la Antártida –aunque para el bolsillo promedio puede resultar un poco caro– es realizar un crucero. Un dato a tener en cuenta es que los cruceros a esta zona solo se realizan durante el verano del hemisferio sur, por que en el otoño e invierno sería imposible acercarse a la zona ya que las aguas corren riesgo de congelamiento y pueden hasta varar el barco en condiciones imposibles.

La mayoría de los cruceros parten de la ciudad de Ushuaia en la provincia de Tierra del Fuego, atraviesan las aguas del Pasaje Drake y luego se navega por unos 5 días hasta la península antártica, ubicada en la región occidental de la Antártida, rodeado por el Mar de Bellingshausen y por el Mar de Weddell. Ya en las costas del continente blanco se podrán hacer expediciones a colonias de pingüinos o acercarse a grande témpanos de hielo en gomones.

Cuando se llega al continente Antártico, si las condiciones climáticas lo permiten, se puede desembarcar y pasar en tierra unas horas.

Otros cruceros parten de Ushuaia pero visitan las islas Shetland del Sur donde hay colonias de pingüinos, lobos marinos y focas. También en la península antártica se explora la isla Decepción y los osados podrán meterse en aguas antárticas templadas por la acción de un volcán sumergido en Caleta Péndulo.

El Estrecho de Gerlache, el Canal Neumayer y el Canal Lemaire son los puntos donde los turistas podrán avistar ballenas en un marco rodeado de costas heladas y glaciares lejanos.

La mayoría de los cruceros de una semana cuestan varios de miles de dólares por persona.

Ártico

A diferencia de la Antártida, el Ártico es un océano cubierto por capas de hielo, por eso los cruceros y los rompehielos son la única manera de recorrerlo, durante el verano del hemisferio norte, entre los meses de junio y septiembre.

Honningsvag, en Noruega, es la ciudad más septentrional de Europa y la que está más cerca del Círculo Polar. La ciudad se convirtió en los últimos años en un punto turístico emergente ya que allí se ofrecen muchísimos tours por Ártico y actividades al aire libre en un clima muy frío.

Los cruceros recorren la zona de Groenlandia y los mares boreales, descubriendo los icebergs, la isla de Devon y Lancaster Sound, donde se pueden admirar osos polares. Este crucero también recorre el mar de Lincoln, las islas de Ellesmere y Baffin.

En los últimos años, cada vez son mayores los barcos que visitan las islas Svalbard, ubicadas entre Noruega y el Círculo Polar, y también otros que recorren las heladas costas de Alaska.

Más información:
www.argentinianexplorer.com
www.antarcticacruises.com.ar
www.polarcruises.com
www.quarkexpeditions.com